Suburra
El fallido Eurovegas de Ostia
Stefano Sollima, director de Romanzo Criminale y Gomorra, ha encontrado la fórmula para relatar de manera sobria y espectacular los truculentos quehaceres de los mafiosos.En esta ocasión, el cineasta adapta a la gran pantalla el libro homónimo (Suburra) de Giancarlo di Cataldo y Carlo Bonini. La película dividida en siete partes (cada una correspondiente a un día de la semana) realiza la cuenta atrás hacia el apocalipsis, que el film marca como el sábado 12 de noviembre de 2011. El porqué de esa fecha salta a la luz de la realidad. Es el día en que Silvio Berlusconi dejó la presidencia del Gobierno italiano. Y pocos meses antes del escándalo Vatileaks que sacudió la Santa Sede. Aunque al final de la proyección aparezca el clásico mensaje recordando que cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia, existe una innegable conexión. Así pues, los intereses de la Política, la Mafia y la Iglesia convergen en una trama de especulación inmobiliaria. A la desesperada, y sobre la bocina, se intenta aprobar en el Parlamento una ley de recalificación del suelo para poder urbanizar un exorbitante complejo hotelero al estilo Las Vegas en la zona costera de Ostia.
Sin dilaciones, se nos presentan los múltiples protagonistas que tomarán juego en una compleja y enmarañada partida. El objetivo final para todos ellos es sacar la mejor tajada posible del lance y llenarse los bolsillos. Pero el camino no será para nada fácil ya que interfieren varios conflictos entre clanes (con muertes incluidas, ¡faltaría más!) que el valedor (encargado de que el negocio se lleve a cabo) deberá solucionar a cualquier precio (más cadáveres). A todo esto, los terceros inmersos en el embrollo tendrán un papel determinante. Al contrario de lo que hemos podido ver hasta el momento en las dos temporadas de la serie Gomorra. Además, otro elemento que no aparece en la ficción televisiva y sí lo hace en Suburra es una familia de origen gitano en el negocio del narcotráfico. Puede que me haya puesto quisquillosa o que su etnia no tenga relevancia en la trama, pero es una novedad en el “universo cinematográfico mafioso” de Sollima. Quizá lo descubramos cuando se emita la serie sucesora del film durante 2017 (la primera producción propia de Netflix Italia).
A los ríos de sangre, les acompaña una fotografía muy luminosa a pesar de la predominancia de la oscuridad nocturna y la constante lluvia en Roma. Además, la capital italiana, por si sola, ya aporta solemnidad a la pantalla. Y todo ello, combinado con una banda sonora variada y muy potente, otro sello distintivo del director. Si conoces la obra de Sollima, Suburra te va a parecer otro magistral y sorprendente trabajo del director romano. Si por el contrario eres virgen en su filmografía, puede que acabes conmocionado. Actualmente, el termino “suburra” en italiano sigue teniendo el significado de un lugar de mala fama, escenario de delitos y de inmoralidad.
Espero que la esencia del director se difumine lo menos posible en su salto a Hollywood con la película Soldado, que se estrenará este año y que contará con los protagonistas de Sicario (2015) de Dennis Villenueve.
Valoración: ****
Puntuación: * (mala) ** (regular) *** (buena)**** (muy buena) / (media estrella)
Ficha
De qué va: En Roma se prepara un gran proyecto inmobiliario que podría convertir la costa en un complejo urbanístico similar a Las Vegas. Samurái, un viejo jefe de la mafia, obtiene el apoyo de la mayoría de bandas del crimen organizado que existen en la localidad de Ostia. Sorprendentemente, esto no será suficiente para conseguir su objetivo final y su proyecto se convierte en una batalla sin precedentes entre políticos, mafiosos y eclesiásticos dejando a su paso ríos de sangre, a la espera de una especie de nuevo orden que anuncia el final de una era (www.inopiafilms.com).
Oficial: www.inopiafilms.com/suburra
Año: 2015
Director: Stefano Sollima
Reparto: Pierfrancesco Favino, Elio Germano, Claudio Amendola, Jean-Hugues Anglade, Greta Scarano, Lidia Vitale, Giulia Elettra Gorietti, Alessandro Borghi.
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