El monje y el rifle
De qué va: En El monje y el rifle, año 2006. El reino de Bután camina hacia la democracia. De cara a la celebración de elecciones, el gobierno organiza simulacros de votaciones con la idea de preparar a la población para algo que desconoce. Mientras, en la ciudad de Ura un viejo lama ordena a un monje que le consiga un arma para afrontar el inminente cambio de régimen. El valioso rifle que obtiene es una pieza buscada por un coleccionista de armas estadounidense (www.filmaffinity.com/es/).
Tráiler: dai.ly/x90ivps
Director: Pawo Choyning Dorji.
Reparto: Harry Einhorn, Tandin Wangchuk, Tandin Phubz, Choeying Jatsho, Deki Lhamo, Tandin Sonam, Pema Zangmo Sherpa.
Oficial: www.acontracorrientefilms.com/movie/-1049
La mía: El cineasta Pawo Choyning Dorji sigue mostrándonos de muy buenas maneras las peculiaridades de su país: Bután. Tras el éxito de su anterior film Lunana. Un yak en la escuela, la primera película de este Estado en competir por el Oscar, el director vuelve a sorprendernos con El monje y el rifle, un perspicaz alegato pacifista, humanista y luminoso sobre las consecuencias de la llegada de la televisión, internet y la democracia al Reino de Bután. O sea, sobre la modernización del país.
Estrenada mundialmente en Sección Oficial en el Festival de Telluride y posteriormente en Toronto, en abril pasó por el BCN Film Fest. El monje y el rifle es una simpática sátira contada con sencillez e ingenuidad que enfrenta la tradición y la modernidad y el pacifismo ante la violencia y el fetichismo armamentístico. Las tramas y conflictos son delicados y sólidos, prefiriendo no meter más el dedo en la llaga, la cinta es una comedia honesta y agradable con una lógica indiscutiblemente efectiva y aplastante sobre la visión occidental y capitalista del mundo. Definitivamente, Pawo Choyning Dorji me ha vuelto a cautivar.